"Mirar las cosas de cara, ser capaces de sorprendernos, tener curiosidad y un poco de coraje; saber preguntar y saber escuchar; evitar los dogmas y las respuestas automáticas; no buscar necesariamente respuestas y aún menos fórmulas magistrales" (Emili Manzano)

sábado, 20 de septiembre de 2014

HISTERIA DE MASAS EN UN INSTITUTO DE JAPÓN

En Japón Internet bulle por la oleada de desmayos de adolescentes durante las clases del lunes en un instituto de la Prefectura de Fukuoka.  Varios estudiantes subieron fotos del esperpéntico espectáculo a sus cuentas de Twitter . 

Aunque la explicación más probable es que las adolescentes sufrieran un cuadro de histeria de masas -aka histeria en masa, histeria colectiva o psicosis de grupo- después de que la primera chica se desmayara, un número nada despreciable de personas lo han atribuido a la presencia de un espíritu vengativo.

Subido desde Twitter


El mundo de los espíritus en Japón


El shinto (aka sintoismo) es la religión indígena de Japón, y se origina con anterioridad al cristianismo y al budismo (660 a.C según la mitología nipona). Postula la existencia de entidades espirituales (kami) presentes en la naturaleza o en niveles superiores de existencia. Este término se ha aplicado a fuerzas sobrenaturales, hombres sobresalientes, antepasados deificados y a deidades que representan ciertos ideales o simbolizan un poder abstracto. 

Aunque el término Yaoyorozu-nokami significa literalmente "ocho millones de dioses", se utiliza para referirse a "muchos dioses", pues la cantidad de deidades shinto aumenta constantemente. Los japoneses, como hijos de los espíritus o kami, poseen de esta manera una naturaleza divina. El shinto promueve vivir en armonía con los kami, y así poder disfrutar de su protección y aprobación. 

Aunque el shinto no se basa en una teología o un dogma específico, a lo largo de los siglos ha impregnado a los japoneses de un código de valores prácticos, ha moldeado sus comportamientos y ha determinado su forma de pensar acerca de numerosos aspectos. De esta manera se acostumbra a decir que los japoneses son más supersticiosos que religiosos.


La posesión por espíritus


El rencor de personas vivas o de aquellos que fallecen de manera brusca y/o violenta pueden generar un espíritu vengativo capaz de poseer a personas o causar desastres. Invisibles (a diferencia de los fantasmas), cuando se entra en contacto con estos "vientos espirituales" se experimentan premoniciones, accesos súbitos de escalofríos o migraña, fatiga extrema, pérdida de conocimiento, etc. Existe mayor riesgo en situaciones de debilidad física (postparto, constitución débil, edad anciana, heridas, enfermedades), que es cuando puede aparecer delirium y, en ocasiones, la muerte del sujeto poseído. 

Se trata de un tema clásico y recurrente en las obras de teatro Noh (la máscara Hannya representa el espíritu de una mujer celosa y resentida), la literatua antigua y moderna (Gengi Monogatari de Murasaki siglo XI, Manazaru de Hiromi Kawakami 2006), los manga y las películas, y se mantiene como creencia extendida en la psicología popular. 

Muchos episodios de hemorragia intracraneal, convulsiones, tiritonas, migraña, desvanecimientos, deja vu, etc, se consideran causados por la posesión de espíritus vengativos por lo que se solicita la intervención de monjes budistas para exorcizar al afectado a través de oraciones. 

Como en la tradición occidental, la relación entre enfermedades mentales y la posesión por espíritus es la que se mantiene más arraigada en la creencias populares japonesas.




El mundo de los muertos en japón


A diferencia de occidente, verano es la estación de las historias de espíritus y muertos en Japón. El O-Bon es una festividad budista que honra a los espíritus de los antepasados fallecidos. Dura tres días, aunque su fecha varía en diferentes regiones (13 a 15 de julio en Tokio, 13 al 15 de agosto en Kioto). 

Durante estos días la tradición dice que la separación entre el mundo de los vivos y los muertos se debilita y los espíritus de los antepasados pueden visitar a sus familiares. A lo largo de estos días destacan las siguientes celebraciones: 
En el Bon Odori la gente se reúne para bailar. La música debe ser alegre para dar la bienvenida a las almas de los ancestros. Se celebra durante la noche, que es cuando las almas de los ancestros regresan al mundo de los vivos. 
En la Tōrō nagashi los participantes flotan farolillos de papel por un río para guiar a los espíritus de los muertos de regreso a su mundo. 
Toro nagash
El Gozan no Okuribi es la culminación de la fiesta de O-Bon. Cinco enormes hogueras se encienden en las colinas que rodean la ciudad. Es el momento en que los espíritus de los familiares difuntos, que han visitado el mundo de los vivos durante el O-Bon, vuelven al mundo de los espíritus. 
Daimoji, durante el Gozan no Okurib

Durante el veranos proliferan las reuniones en las que se narran leyendas de encuentros entre vivos y muertos, y los media se llenan de relatos, series y películas de temáticas fantasmagóricas.


Los hechos en el instituto de Fukuoka


Durante el inicio de este verano los medios de comunicación nipones narraban los hechos acontecidos en el instituto japonés de esta manera:

Alrededor de las 10 am del lunes 30 de junio de 2014, en el Instituto Yanagawa, un colegio privado en la prefectura de Fukuoka (no confundir con la ciudad que sufrió la tragedia nuclear tras el tsunami, Fukushima, que está muy al norte de Tokio, separadas por más de 1000 km). Durante las clases y de manera inesperada,  una estudiante de primer año (15- 16 años) comenzaba a gritar, se quedaba paralizada, y finalmente se desmayaba. Poco después, varias de sus compañeras comenzaban a mostrar las mismas conductas. El número se incrementó hasta 27 cuando estudiantes de las clases adyacentes se acercaban a observar lo que estaba sucediendo. 


Las estudiantes afectadas, todas chicas entre 1er y 3er curso de Instituto (15-18 años en el sistema japonés) fueron conducidas a casa por sus tutores, y finalmente la escuela cerró sus puertas a la 1 pm. El instituto permaneció cerrado al día siguiente para que las autoridades investigaran las causas del incidente.


A parte de lo llamativo de los acontecimientos puedan parecer, la historia se vuelve realmente interesante desde el punto de vista social y psiquiátrico cuando aparecen las versiones de que las chicas habían sufrido la posesión por parte de un  espíritu.  

Cada año, los estudiantes de primer curso del Instituto de Yanagawa realizan una excursión al cercano Monte Hiko como parte de sus actividades extraescolares. Desde hace tiempo existen creencias de que las áreas colindates, incluyendo la impresionante Presa de Aburagi, están habitadas por el espíritu de una joven decapitada. La hipótesis sería que una de las escolares había sufrido una posesión por parte de este espíritu durante el reciente viaje de la clase, y que había viajado con el grupo durante el viaje de vuelta.


Algunos de los tweets de los estudiantes


"En la escuela está circulando el rumor de que hemos traído un espíritu maligno de la montaña." 
 "Más de 15 estudiantes, están cayendo como moscas. Las chicas dicen cosas como "¡Mátame!" y "¡Morir!". Todo es muy loco. Estamos en clase esperando..."
"Al final, han cerrado la escuela. El número de chicas desmayadas: primero cinco, que pasaron a 15, para finalmente alcanzar un total de 25 chicas. Muy freak"
Muchos otros realizaban comentarios online mientras las noticias se extendían:
"¿Sabéis si están bien las estudiantes? ¿Es histeria de grupo? Las imágenes son aterradoras" 
"Más de 20 chicas del Instituto de Yanagawa han sido poseidas por un epspíritu y se han desmayado. Es aterrador. La escuela al completo está en un estado de pánico y han cerrado"



La opinión del especialista local


El psiquiatra japonés Rika Kayama refiere que los estudiantes durante la adolescencia pueden sufrir una excesiva tensión y ansiedad, las cuales son muy "contagiosas", y añade que el cuadro de crisis de pánico grupal podría haber sido desencadenado por prácticas de ocultismo.
"La única manera de prevenir la recurrencia de los episodios y evitar la expansión del cuadro a otros estudiantes es poner distancia entre las personas y la situación que inició el episodio. Sin embargo, la disponibilidad de medios de rápida difusión de estos cuadros, como Twitter, aumenta el riesgo de nuevos episodios".




En los medios occidentales ha llamado la atención que al preguntar a los psiquiatras sobre la posibilidad de la posesión por parte de espíritus, estos responden con la fórmula "kangaenikui" que literalmente se traduce como "difficult to think" o "difícil de creer", en lugar de impossible, just silly or ridiculous, e interpretan que en Japón es aceptable la creencia en Espíritus y Fantasmas.

Aunque es cierto que la existencia de espíritus y el poder destructivo de los celos y el resentimiento (sobretodo femenino) es un tema clásico de la historia y la cultura japonesa, el impacto actual es moderado y se asemeja al discurso occidental que asocia los actos bondadosos y malvados con Dios y el Diablo. Hoy, uno de cada tres estadounidenses cree que los ángeles y los demonios juegan un papel activo en su vida diaria. Es una narrativa más tradicional que religiosa.

El error de los medios occidentales ha sido la traducción literal "kangaenikui" en "difficult to think" o "difícil de creer." El estilo no confrontacional de la cultura japonesa hace que frases como "me lompensaré", "es difícil", etc, se traduzcan realmente como "es imposible" o "no va afuncionar". Incluso hai (sí) tienen muchos matices ...

Cuenta Javier Landeras en su estupendo Cómo hacen los japoneses (p 141-142) que si durante unas negociaciones un japonés pronuncia "Kangaete okimasu", es decir "I will think about it" (me lo pensaré),  es una forma cortés de decir "no". Numerosos occidentales han vuelto a sus jefes con lo que creían un esperanzador; "se lo van a pensar..."  
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Otra vuelta de tuerca


Mientras que las investigaciones oficiales de la policía finalmente han atribuido los episodios de desmayos a un proceso de histeria de grupo provocado por el desmayo de la primera chica, varios estudiantes y sus familiares no descartan la posibilidad de que se trate de un espíritu vengativo y han cambiado a sus hijos de instituto. Incluso algunos aventuran que la responsable puede ser Hanako, que según una leyenda urbana japonesa, es el espíritu de una joven de la 2ª Guerra Mundial que habita en los baños de las escuelas japonesas ...

Tras haber visitado varias escuelas japonesas doy fe que se puede vivir en sus lavabos, a diferencia de nuestros institutos donde ya no se puede convivir ni en las aulas ...



 Fuentes: Hachima KikoNikkan Sports, citados por Rocket News 24 y Japan Today

2 comentarios:

  1. ¡Hola!
    Mis más sinceras felicitaciones por la entrada, se nota muy trabajada y además interesantísima, ¡me ha encantado!
    Has combinado la psiquiatría con las creencias japonesas relativas a maldiciones y fantasmas, que son dos cosas que me apasionan, dos de mis debilidades. Además y como has dicho, es interesante el aspecto social de todo este asunto, cómo se "contagia" la histeria y la explicación que le dan. Simplemente alucinante.

    Espero poder leer (y disfrutar) pronto entradas tan estupendas como éstas.
    Nos leemos.
    ¡Saludos!

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  2. Muchas gracias por tus comentarios. El "contagio" de síntomas es algo más frecuente de lo que pensamos, también en los países occidentales. No es infrecuente la propagación de síntomas gastrointestinales entre escolares, los cuales,en ocasiones, se asocian erróneamente con intoxicaciones alimentarias. También es conocido el contagio de síntomas en situaciones de guerra, hecho que provocó la ejecución de muchos afectados por parte de los oficiales para evitar durante la Primera Guerra Mundial.

    Me alegra que compartamos aficiones. Si quieres profundizar sobre la posesión en Japón, te recomiendo las novelas de Fumiko Enchi, en especial Máscaras Femeninas.

    Saludos

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