"Mirar las cosas de cara, ser capaces de sorprendernos, tener curiosidad y un poco de coraje; saber preguntar y saber escuchar; evitar los dogmas y las respuestas automáticas; no buscar necesariamente respuestas y aún menos fórmulas magistrales" (Emili Manzano)

viernes, 10 de enero de 2014

LA OBESIDAD COMO ENFERMEDAD (6 de 6): CONCLUSIONES DEL CSAPH

Ante la solicitud de propuesta 115-A-12 en el Congreso Anual de la Asociación Médica Estadounidense (American Medical Association, AMA) de 2012, "La obesidad debería ser considerada una enfermedad médica crónica", el Council on Science and Public Health (CSAPH) realizaba un informe 2013en el que repasa las definiciones de obesidad y enfermedad, las limitaciones de estas definiciones, y las consecuencias beneficiosas y perjudiciales de clasificar la obesidad como una enfermedad.




CONCLUSIONES

1- No existe una definición de enfermedad única, acreditada, clara, y ampliamente aceptada. La obesidad cumple algunos criterios, pero no otros, de las distintas definiciones de enfermedad. Diversos autores e instituciones, incluso, no se ponen de acuerdo si la obesidad cumple un mismo criterio.

2- No se conocen los mecanismos fisiológicos por los que algunos individuos obesos (e.g., obesos sin alteraciones  metabólicas) no desarrollan complicaciones secundarias al exceso de tejido adiposo. (Wildman 2008)

3- No existe un indicador diagnóstico clínico práctico y sensible de obesidad. El IMC aislado presenta claras limitaciones. La reciente Guía sobre el manejo de la obesidad y el sobrepeso del NHLBI no ha podido ayudar a aclarar las mejores medidas de la obesidad, ni siquiera por lo que respecta al riesgo cardiovascular. 

4- La etiqueta de enfermedad es probable que mejore la salud de muchos individuos, pero podría empeorar los resultados sobre la salud general de otros. La obesidad, medida por el IMC, se asocia con diversas complicaciones , con mayor consistencia entre poblaciones en los valores más altos de IMC. Sin embargo, debido a las limitaciones del IMC para diagnosticar la obesidad como una enfermedad, en lugar de un factor de riesgo (como fumar), un "trastorno", o un "proceso" ("condition"), no queda claro que mejoraría la salud general de todos los individuos catalogados como obesos. 

5- Se requieren mejores estrategias de salud pública y asistencial para ayudar a los individuos en la mejoría del estilo de vida y la prevención de complicaciones asociadas a la obesidad. 



RECOMENDACIONES DEL CSAPH

Se reafirman las Directrices de la American Medical Association

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