"Mirar las cosas de cara, ser capaces de sorprendernos, tener curiosidad y un poco de coraje; saber preguntar y saber escuchar; evitar los dogmas y las respuestas automáticas; no buscar necesariamente respuestas y aún menos fórmulas magistrales" (Emili Manzano)

viernes, 25 de noviembre de 2016

LA GENÉTICA COMO GUÍA PARA LA TOMA DE DECISIONES


Pese a saber que los genes sólo codifican proteínas y no conductas, son muchos los que siguen buscando las causas de conductas humanas complejas, como la delincuencia, en variaciones genéticas.

Recordemos el experimento mental que propone el biólogo John Maynard Smith, quien nos pide que imaginemos una película de duración de dos horas que cronometre la evolución desde los primeros vertebrados hasta nuestra aparición: 
"el hombre productor de herramientas aparecería únicamente en el último minuto". 
Luego, el biólogo imagina una segunda película de dos horas que haga un seguimiento de la historia del hombre productor de herramientas:
"la domesticación de animales y plantas se mostraría sólo en el último medio minuto, y el periodo transcurrido entre el motor a vapor y el descubrimiento de la energía atómica no ocuparía más de un segundo". 

En la historia natural el tiempo de la cultura es breve. Sin embargo en estos pocos segundos los seres humanos han ideado modos de vida enormemente distintos, y sin lugar a dudas son esos cambios los que determinan mucho de lo que en la actualidad consideramos como enfermedades.

Sin embargo parece que nos adentramos en la posibilidad de constituir una sociedad en base a las potencialidades y riesgos genéticos de los individuos como muestra la distopía futurista Gattaca, de Andrew Niccol (1997). 






Por ejemplo, la decisión "automática" de los médicos de recomendar el aborto frente a un feto con sdme de Down se establece sin debate, como una conclusión "racional" a un defecto de potencialidad, y sin embargo nunca he oído a unos padres arrepentirse o lamentar este extremo y de manera habitual destacan múltiples cualidades de sus hijos con este sdme genético.

Si los expertos no pueden dar sentido a su trabajo, ¿qué se puede esperar del público? Como decía Hannah Arendt se debería producir un debate público, y una posterior acción política que permitiera fortalecer la voluntad de la humanidad a ser dueña de sus herramientas.




Gattaca (1997), de Andrew Niccol. Extraordinaria película que muestra una distopía futurista en la que la sociedad está estructurada en función de la potencialidad de los genotipos




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